Familia del Adicto
La familia del adicto presenta situaciones de desorden y caos en dónde son constantes las peleas y discusiones.
El adicto no interacciona con la familia ni la familia misma entre sí.
Dentro de la dinámica familiar se repiten sistemáticamente los mismos errores estableciendo vínculos de mutua dependencia que llevan a un sufrimiento sin consuelo y a la victimización.
Los integrantes de este tipo de familias muestran un constante impulso a ocupar el lugar del otro, un fuerte vacio frente a la ausencia del adicto como a su independencia.
Desborde, miedo, enojo, bronca y daños son las constantes muestras de roles alterados, de resistencias al cambio, de falta de diálogo y de falta de límites.
Una familia con un integrante adicto respondiendo de esta manera al consumo de sustancia, se encuentra en riesgo de actuar frente al peligro, naturalizando el maltrato, viviendo en permanente frustración, en un intercambio donde los roles se hayan alterados y las imágenes paternas confusas.
El ejercicio de la sobreprotección, una de las formas más comunes de la adherencia, genera la falta de crecimiento en la que el reproche y la culpa son moneda corriente.
El adicto no interacciona con la familia ni la familia misma entre sí.
Dentro de la dinámica familiar se repiten sistemáticamente los mismos errores estableciendo vínculos de mutua dependencia que llevan a un sufrimiento sin consuelo y a la victimización.
Los integrantes de este tipo de familias muestran un constante impulso a ocupar el lugar del otro, un fuerte vacio frente a la ausencia del adicto como a su independencia.
Desborde, miedo, enojo, bronca y daños son las constantes muestras de roles alterados, de resistencias al cambio, de falta de diálogo y de falta de límites.
Una familia con un integrante adicto respondiendo de esta manera al consumo de sustancia, se encuentra en riesgo de actuar frente al peligro, naturalizando el maltrato, viviendo en permanente frustración, en un intercambio donde los roles se hayan alterados y las imágenes paternas confusas.
El ejercicio de la sobreprotección, una de las formas más comunes de la adherencia, genera la falta de crecimiento en la que el reproche y la culpa son moneda corriente.
Teléfono 24 hs :
011.4717.2672
Estamos a tu disposición las 24 hs. para atender urgencias y todas las dudas o consultas que desees realizar.
También podes contactarte a través de los siguientes teléfonos o WhatsApp:
011.4717.2672
Estamos a tu disposición las 24 hs. para atender urgencias y todas las dudas o consultas que desees realizar.
También podes contactarte a través de los siguientes teléfonos o WhatsApp: